No pocas
dificultades son las que encuentra el aficionado que, ávido de
recolectar sus propios ejemplares, se aventura en un viaje para
capturar los valiosos individuos que mas tarde integraran su
colección.
Comenzando por
decir que las arañas grandes y escorpiones son mucho más escasos de lo
que la gente cree y que además de esto son muy difíciles de encontrar
en sus ambientes naturales, ya sea que vivan bajo piedras o troncos
caídos o que construyen sus cuevas en la tierra, no será nada fácil su
localización, debido a las escasa señales externas que nos hagan
sospechar de su presencia.